Creo que todos estaremos de acuerdo en que el 2020 no ha sido un buen año para la mayoría. El sector de los eventos, así como tantos otros, se ha visto muy afectado y ha tenido que reinventarse. La presencialidad ha sido lo menos, dejando paso a formatos híbridos o completamente virtuales dependiendo de la naturaleza del propio acto.
Dentro de los eventos virtuales podemos al menos describir dos modalidades diferentes: virtual en directo y virtual en diferido.
El pasado mes de octubre tuve el privilegio de poder participar como ponente en el Foro Mundial de Protocolo, Comunicación e Imagen donde se optó por una plataforma digital donde en directo se asistía a las conferencias propuestas. Bajo mi punto de vista, el papel del anfitrión cambia completamente en este tipo de actos y supone un reto extra para la organización. Se nota «raro» el hecho de ver como se da la bienvenida a todo el mundo en el mismo espacio. Una vez el invitado 300 ha entrado y se le saluda…
Por otro lado, en noviembre asistí al Congreso Nodos del Conocimiento 2020. Este acto fue diferente, puesto que se hacía en diferido. Es decir, todo el mundo ha participado en un vídeo sin tener que estar de forma sincrónica en un mismo espacio. La experiencia, en mi opinión, ha sido positiva, puesto que te da la libertad de poder ver las intervenciones a tu ritmo. Incluso pasadas las fechas del congreso. Si el objetivo es compartir conocimiento considero que es la forma más inteligente de hacerlo. Al fin y al cabo, todos tenemos nuestras rutinas y un formato como este ofrece mucha libertad y adaptabilidad.
Eso sí, la organización no quería olvidar el factor humano, por ello, dio una serie de pautas para poder hacer los vídeos. Os dejo a continuación las más importantes y el enlace por si os interesa conocerlas más en profundidad (https://nodos.org/presentacion-virtual/):
- En cualquier caso, es imprescindible que al menos exista una narración por parte del ponente, no se admitirán video que sólo contengan texto escrito, la “presencia humana” de al menos uno de los firmantes será necesaria.
- Si su presentación se basa solo en la exposición de diapositivas con una narración de fondo, sería muy recomendable (no obligatorio) añadir una presentación o despedida donde se le vea ante la cámara, con el fin de promover el contacto humano (aunque sea visual) entre participantes.
En mi opinión, lo importante de todo esto es que la organización dio unas pautas de cómo actuar. Aunque pueda parecer lógico mucha gente no tiene en cuenta el tener la cámara en marcha, la iluminación, el fondo que se ve, etc. Considero que, independientemente de que seas asistente o ponente, se debería de empezar a marcar unas reglas para los eventos virtuales.
¿Qué os parece? ¿Cuál ha sido vuestra experiencia en eventos virtuales?